Johnny Alberto SalazarNAGUA.-Este 16 de agosto definitivamente se convirtió en otro día histórico con la juramentación de las nuevas autoridades municipales que hemos tomado las riendas del Poder Municipal para los próximos 6 años.
Dicen que todo fue “un palo” y se lo contare con detalles.
Desde las 8 de la mañana ya había ambiente como para despedir a las autoridades salientes y recibir a las entrantes.
Tristeza entre quienes se van y alegría entre quienes llegan.
Cuando llegue al entorno del ayuntamiento ya el Padre Rogelio Cruz, se encontraba en el lugar con 50 jóvenes quienes llegaron de todas partes.
El sacerdote del pueblo vino a Nagua a darle apoyo al regidor del Pueblo representado en un humilde servidor.
Rogelio junto a sus acompañantes se vistieron con una camiseta que en la parte frontal dicen “Coño despierta dominicano (a)” y una gorra del Movimiento SE PUEDE.
Nos encontramos y me dijo “aquí estamos dispuestos a lo que sea”.
Junto al grupo del Padre también estaban cientos de niños y adultos que llegaron para acompañarme en la toma de posesión y para luego compartir una comida colectiva que hicimos como forma para celebrar una actividad definida como histórica.
Luego me puse a esperar a mis colegas regidores y los primeros que ví llegar fueron a los perredeístas Jaquelin Then, Antonia Fabián, Angel Manuel López y a Ariel López.
Todos exhibían su gala con trajes, zapatos, carteras, relojes, perfumes y muchas cosas más, de altísima calidad, que a decir de muchos pudo haber costado una fortuna.
Luego se escucho un reperpero y se movilizaban muchos hombres con gafas oscuras de esos que parecen que están “bravos”, con la cara dura.
Es que llegaba en una jepeta negra Angel de Jesús López (EL COMPA), con su esposa Marisela Lebron y le esperaba la vice alcaldesa Keyla Wilmot, con una sonrisa a flor de labios.
Querían mostrar que eran grandes líderes y parecían que estaban muy contentos.
El Padre Rogelio en cambio, parece que estaba “quillao” con el reperpero que vio y se le escucho decir “y que vaina es esta”.
Minutos después llegaron los concejales del PLD Israel Polanco y Allende Polanco y junto a ellos su aliado del PASOVE José Yapor.
El glamour también era por todo lo alto y parece que al igual que los perredeístas, los del PLD se gastaron toda una fortuna con la “pinta” que se dieron.
Muchos me miraban y hasta me preguntaron: ¿Johnny y tu no te va a juramentar, y donde ta el traje tuyo?.
Como vestimenta me gaste un total de 300 pesos que lo detallare a continuación:
Un par de tenis campeón en la tienda Nueva Creación, los que su propietario conocido como Papi Creación, me le hizo un descuento de 35 pesos, dejándolo en 200.
Los cien pesos restantes fueron por la compra de un desodorante y una medias de esas que le dicen deportivas.
Tenia unos pantalones viejos que no sea veían tan mal, de esos que le dicen Jean.
Los combine con una camiseta del Movimiento SE PUEDE, que me regalo el Padre Rogelio y según me dijo le costo “como 100 pesos”.
No era asunto de tacañería.
Es que cuando supe que algunos regidores se gastaron hasta mas de 100 mil pesos para pasarse unas horas en el ayuntamiento, yo en cambio quise usar lo que podía gastar en la compra de cuadernos y lápices para regalarlos a niños y niñas de los barrios a fin de contribuir con la posibilidad de que sean los verdaderos futuro de la Patria.
Muchos me miraban raro y por si acaso no me dejaban entrar al lugar en donde el pueblo me eligió, decidí llevar conmigo la Ley Municipal y la Constitución de Republica para enseñarle a todos que en ninguna pagina encontré alguna regla que demuestre que un regidor que gana 40 mil pesos, esta obligado a gastarse una fortuna para aparentar.
Salude a todos y a todas, y se reían como si se burlaran de mi gesto al dedicar una parte de mis ahorros a favor de quienes el profesor Juan Bosh, llamo una vez “los hijos de machepa”.
Pero mire a hacia la asamblea, había una gran multitud y me di cuenta que la enorme mayoría vestía con ropa sencilla, quizás con el mismo costo que la mía.
Solo unos muy pocos vestía de “saco y corbata”.
Fui a ocupar la silla que “me tocaba”, pero justo al lado, pero de pie, estaba Marisela, la esposa del Compa.
Me senté, pero de inmediato me pare para darle la silla a quien de acuerdo al “protocolo” debía estar a la derecha del nuevo Alcalde. En esa silla estaba la vice alcaldesa Keyla Wilmot, quien siempre sonreía como toda una mega diva.
Marisela no quería sentarse, parecía que le tenía temor a alguien.
Pero insistí al decirle que “yo soy un caballero y que además usted es la primera dama y por lo tanto debe ocupar el espacio que le corresponde”.
Finalmente, como la silla era grande la compartimos, pero El Compa, de repente le hizo seña para que se parara.
Yo también lo hice y la silla permaneció vacía por unos minutos, hasta que mis colegas del PRD se enteraron de la situación y buscaron otra silla, que luego ocupe al otro lado del salón.
El presidente de la Junta Municipal Electoral Cristóbal Cuello Nieto, el juramento luego de que se despidiera el síndico saliente Inocencio Mercedes y los regidores que le acompañaron durante el periodo correspondiente.
Fue en ese momento que pasamos a la primera fila y, no se como, pero por fin Marisela la esposa del Compa se sentó a la derecha de su esposo, el nuevo Alcalde a quien le correspondió tener a su izquierda a la vice alcaldesa Keyla Wilmot.
Más que un alcalde, El Compa parecía todo un rey.
Es mas llego un momento en que hasta creyó que era un emperador de aquellos del tiempo de la vieja Roma.
Se le vio vibrar de emoción cuando Lito Raposo y Popy Cordero, unieron la calidad de sus voces para cantarle en exclusiva la canción titulada “éxito”.
Decidí marcharme luego que se produjo un empate tras el tranque motivado por los bloques del PLD y del PRD.
Se presentaron dos planchas. En la del PLD me propusieron como vicepresidente y en la otra, la del PRD “me sacaron los pies y hasta me subieron los vidrios”.
Me abstuve de votar y se produjo un empate. Minutos después termino la sesión dirigida por la concejala Antonia Fabián.
Me retire minutos antes de terminar el acto tras recordarle a la asamblea que “a mi no me eligieron para colaborar con nada, sino que tenia la obligación de trabajar para el pueblo”.
Abajo, allá en donde estaba el pueblo con camisetas de esas que usan los pobres, me esperaba el Padre Rogelio y un nutrido grupo de personas con quienes tenia previsto compartir una comida típica pautada en un encuentro en El Parque Ecológico, que inauguramos recientemente.
Llegamos al lugar, izamos la Bandera Dominicana, compartimos la comida bendecida por el Padre Rogelio y el Pastor Braulio y al finalizar recogimos toda la basura como señal de que el pueblo nos eligió para trabajar.
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