NAGUA.-Fue apresado la mañana de este viernes en el muelle de Sabana de la Mar, el comerciante, cuyos familiares denunciaron que desconocidos lo habían secuestrado y solicitaban un rescate de un millón de pesos, tras ser sorprendido en completa calma, solo y hablando por su teléfono celular a la espera del dinero, informó la Policía Nacional.El arresto del comerciante Ramón Burgos Guzmán (Robertico), de 32 años, quien pretendía recibir un millón de pesos de sus familiares, fue materializado por agentes policiales, adscritos a la Unidad Antisecuestros, quienes asumieron la investigación del caso, tan pronto sus familiares presentaron la denuncia, indica una nota de la Uniformada.
La institución del orden precisó que Burgos Guzmán fue arrestado a las 7:20 de la mañana cuando esperaba a un emisario que llegaría al referido muelle a bordo del barco que hace la ruta Samaná-Sabana de la Mar, con el dinero para su supuesta liberación.
Los agentes actuantes materializaron la detención del comerciante Burgos Guzmán, momento en que conversaba por la vía telefónica con sus familiares, procurando detalles para la entrega del dinero.
La Policía informó que en poder de Burgos Guzmán los oficiales investigadores ocuparon tres cheques, uno valorado en RD$63 mil pesos, otro en RD$44 mil y un tercero en RD$171 mil, propiedad de la Factoría José Galán, donde labora.
El presunto falso secuestro de Burgos Guzmán, quien reside en la sección Aguacate de Yuna, Nagua, fue denunciado el martes, y desde entonces, se había hospedado en una pensión de Sabana de la Mar.
La institución del orden precisó que desde ese lugar había mantenido comunicación por la vía telefónica con sus familiares, a quienes les explicaba que sus secuestradores lo tenían en alta mar y si no conseguían tres millones de pesos lo matarían.
En reiteradas ocasiones Burgos Guzmán decía e imploraba a sus familiares “Ay no me dejen morir, me van a tirar al mar, consigan hasta un millón de pesos”.
Todo ese drama, de acuerdo a los informes policiales, era realizado desde la pensión donde se encontraba, ubicada en Sabana de la Mar.
En principio Burgos Guzmán, llamó a sus familiares y les dijo que había cambiado varios cheques en un banco y posteriormente desconocidos lo habían secuestrado y que pedían un rescate de tres millones de pesos.
Tras la denuncia, de inmediato su hermano Javier Burgos Guzmán, se trasladó a la Policía de Nagua para narrar la versión, razón por la que se activó la Unidad Antisecuestro.
Desde entonces los investigadores Policiales iniciaron una intensa búsqueda para ubicar al supuesto secuestrado y apresar a los responsables del hecho.
El hombre dejo un motor abandonado en las proximidades de una sucursal del Banco de Reservas de Nagua, desde donde dijo fue raptado por desconocidos.
