Johnny Alberto SalazarNAGUA.-La lluvia que castigo esta población la noche del lunes y la madrugada del martes pusieron a prueba la critica situación del hospital publico doctor Antonio Yapor Heded.
Este centro de salud de pronto se convirtió en una especie de cloaca gigantesca que empeoraba la crítica situación de los internos.
Todo comenzó cuando el mal olor inundo al brotar los pozos sépticos, cuya agua entro nada más y nada menos por las salas de las mujeres parturientas.
Luego esta agua con olor nauseabundo se regó por las salas para hombres y niños para continuar por los pasillos que dan acceso a la sala de entrada.
Al parecer solo quedaron libres de estas aguas cloacales la oficina del director y la sala de emergencia.
Muchos pacientes abandonaron el centro asistencial, mientras otros optaron por quedarse encima de sus respectivas camas ante el temor de contraer una enfermedad peor que la que fueron a curar.
Los médicos, enfermeras y otros componentes del personal de turno decidieron encerrarse en zonas apartadas a fin de no ser victima de alguna enfermedad generada por el hedor imperante en el lugar.
El director del centro doctor Angel Abranzon, opto por llegar al lugar pasadas las 3 de la mañana para percatarse de la critica situación y según supo Vidadominicana.com, en lo inmediato dispuso el cierre temporal de la sala de cirugía.
En las fotos se pueden apreciar distintos pasillos con agua aparentemente limpia, pero con un terrible mal olor, debido a que provenían de los pozos sépticos.
Como si fuera poco, el hospital de Nagua presenta un grave deterioro en el techo y se nota con las múltiples filtraciones.
Por suerte a pesar de la tanta lluvia, los desalojados y los que sufrieron pérdidas de utensilios, no fue necesario llevar a nadie al hospital con alguna situación de emergencia extrema que requiriera su internamiento.
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